Hoy quiero contarles la historia de una mujer que olvidó las clases sociales y se enfocó en su propósito:
Sarah Breedlove , más conocida como Madam C.J Walker, nació el 23 de mayo de 1867, en Delta Luisiana, logró una gran fortuna usando el Network Marketing como estrategia.
Fue una empresaria y filántropa estadounidense y la primera mujer afroamericana en convertirse en millonaria.
Sarah era la menor de seis hermanos, sus padres y hermanos mayores fueron esclavos en la plantación Madison Parish de Robert W. Burney.
Ella fue la primera hija de su familia en nacer en libertad luego de la Proclamación de Emancipación, emitida por Abraham Linconl en 1863.
Sarah, se casó muy joven con Moses McWilliams y tuvo una hija a la que llamó Lelia. Luego de enviudar a los 20 años, se mudó con sus hermanos a San Luis.
Ellos eran barberos y ella consiguió trabajo como lavandera, gracias al cual le podía dar educación a su hija.
Como muchas mujeres de su época, Madame C.J Walker padeció de problemas en su cuero cabelludo que le ocasionaron caída del cabello.
Para finales del siglo XIX, pocas familias tenían acceso a suministro de agua en EE.UU. y muchos de los productos que usaban en la piel contenían componentes como soda caústica.
En 1905, Sarah fue contratada como comisionista por la empresaria afroamericana Annie Malone.
La experiencia que Sarah obtuvo vendiendo productos para el cabello, le permitió comenzar a desarrollar sus propios productos.
Sarah creó su propio champú y ungüento curativo para el cabello. Con la ayuda de su reciente esposo Charles Joseph Walker, que vendía publicidad en periódicos, empezó a promocionar sus productos, ya bajo el nombre que la hizo famosa: Madam C. J. Walker.
Network Marketing
En 1908, Madam C.J. Walker inauguró una fábrica y una escuela de belleza en Pittsburgh, Pensilvania. A través del Network Marketing, logró un notable éxito al organizar agentes de ventas para sus productos y recorrer el este y sur del país para promover su emprendimiento.
Tanto Sarah como su esposo fueron fervientes defensores del “Método Walker”, que se basaba en la aplicación y uso de los productos desarrollados por ella.
En 1917, llevó a cabo su primera conferencia anual llamada “Madam Walker Beauty Culturists” en Filadelfia. Un año después, en 1918, se trasladó a Villa Lewaro, una residencia situada en Irvington, Nueva York, diseñada por Vertner Tandy, el primer arquitecto negro certificado en Nueva York.
La construcción de la casa tuvo un costo de 250,000 dólares, aproximadamente equivalente a 3.2 millones en la actualidad.
Justo antes de su fallecimiento en 1919, Madam Walker donó 5,000 dólares (equivalentes a unos 65,000 en la actualidad) a obras sociales. En su testamento, destinó dos tercios de sus futuras ganancias a la caridad y a preservar su legado.
Madam C.J. Walker falleció a los 51 años, siendo reconocida como la mujer afroamericana más adinerada de los Estados Unidos.
Quizás te preguntes, ¿cómo logró este ascenso meteórico en su negocio? A continuación, te presento tres razones que contribuyeron a su éxito:
Pasión:
Observa a Sara, quien nunca vaciló en perseguir su sueño, nunca sintió temor al tomar medidas y desafiarse a sí misma frente a una sociedad que quizás no le facilitaría destacar.
Ella dejó atrás el miedo de enfrentarse a las barreras de clases sociales de su época, en un contexto en el que la mujer estaba relegada al hogar, donde su raza era marginada y vulnerada.
Estrategia:
Sara tenía un claro entendimiento de cómo impulsar el crecimiento de su negocio de manera veloz, y siempre tuvo la visión de formar un equipo de ventas sólido. Sin embargo, examinemos esta parte: Sara no buscaba simplemente a mujeres que no estuvieran familiarizadas con su negocio. ¿Qué hizo entonces?
Ella eligió específicamente mujeres de su misma comunidad, aquellas que compartieran la misma problemática que la llevó a crear su producto.
Una vez que estas mujeres experimentaban los beneficios del producto y alcanzaban los resultados deseados, sus experiencias personales se convertían en poderosas historias de éxito para promocionar y vender el producto.
Compromiso social:
Detrás de esta estrategia, Sara perseguía un propósito claro: brindar a mujeres en situaciones difíciles, similares a la suya, la oportunidad necesaria para superarse.
Su objetivo era que, a través de su determinación por alcanzar grandes metas, inspirara a otras mujeres con aspiraciones similares.
Con éxito, logró establecer una empresa multinivel de gran envergadura, generando beneficios significativos para todos los involucrados.
El Network marketing se sustenta en tres pilares fundamentales. Si estás considerando incorporar esta estrategia en tu negocio, es crucial tener presentes estos tres puntos clave: Pasión, Estrategia y Compromiso Social.